domingo, 11 de octubre de 2009

Relato de una noche alucinada





Convencido de que la parada ante el combinado incaico no era más que un trámite, decidí darle descanso al celular y no ser el germen que encendiera la mecha de la cadena de mensajitos. Pero la cuestión venía aburrida y no me pude resistir.

Los cánticos desesperados por Palermo que bajaban de la tribuna Centenario, me hicieron ver a un Panza enajenado pidiendo por su ídolo.

- ¿Estás pidiendo a gritos por Palermo?, sugerí.

- No, no estoy loco- respondió, a sabiendas que más tarde podría darse vuelta con la tranquilidad de siempre.

Silencio de radio un rato más. Sin embargo, el gol de Higuaín, el partido al alcance de la mano y cierto dulce sabor riverplatense en la conquista (recuerden que fue Aimar quien dio la asistencia al Pipita) fueron el acicate necesario. Manoteé el teléfono y con destino al Panza, chicaneé.

- Gol de River, pueden gritarlo.

Acaso preocupado por los continuos relámpagos que estallaban en el cielo, o porque hasta entonces Palermo no había hecho nada, el Panza contestó.

- Es el Perú el rival, boludo- , bramó indignado. Y luego consultó por Ecuador.

Palermo recibe una patada en la nariz, sangre en su cara y camiseta, pronóstico de aparición heroica. Hora de tocar a Buscemi.

- Vas a ver que Pies de Mármol se viste de héroe todo lleno de sangre, como siempre.

La fina pluma de Buscemi entra como un estiletazo.

- Es San Martín cruzando los Andes. Ahora hace un gol de chilena o algo así-, vislumbra.

- La heroica en medio del diluvio!-, devuelvo.

El temor se empieza a hacer presente en medio del temporal de lluvia, viento y centros peruanos. Otra vez la mirada crítica de Buscemi toca a mi celular.

- ¡Hay un cagazo! Queremos bajar la cortina y falta media hora. Que vaya Schiavi de nueve, a jugar de torre- propone, desesperado.

- Es tremendo el miedo. Se palpa en el aire. Me da un bobazo en cualquier momento - le aviso.
- ¡No, que te iba a pedir que vengas a hacerme masajes cardíacos! La de recién casi me mata- explica en referencia a una de las tantas revolcadas de Romero y al pseudo penal de Insúa.

El Panza rompe el silencio y desde el corazón del temporal, espeta: - Increíble, este equipo apesta. No está muy locuaz. Acaso el miedo le acalambre los dedos.

Argentina va cada vez más hacia atrás. El viento arrecia y amontona peruanos en el área como si fueran marionetas. Mascherano, desbordado, juega su peor partido en años. No hay señal de celular por la tormenta, temo por la salud de Buscemi.

Hasta que en medio de un trueno, como una exhalación el teléfono salta y entran tres mensajes seguidos de un Buscemi furibundo.

- Todos con el culito contra el arco y a aguantar el golcito. ¡Contra el último!- estalla.
- Quiero poner Chile - Colombia, parece un partidazo- la adrenalina evidentemente le hizo mal y el oxígeno llega en escasa cantidad al cerebro.
- ¡¿Por qué nos tienen en un arco?!- le grita al viento.

- Tengo el cuore en un puño- alcanzo a escribir con mano temblorosa.

El partido ya es una caricatura. El diálogo crece en intensidad al mismo ritmo que los ataques incaicos.

- Es una vergüenza. La gente insulta. Diegote se nos muere hoy y yo me voy atrás de él. Esto es una locura-. Sale mi mensaje.

Buscemi no pierde las mañas: - Llamen al Doctor Cahe, que hoy Diegote la queda.

Romero sigue atajando todo. El medio campo no es capaz de frenar a un anciano en muletas.

- Adiviná con qué parte mi anatomía estoy cortando clavos- proponé Buscemi, tratando de quitarle dramatismo al momento.

No estoy para jugar a las adivinanzas. - A mí no me entra una aguja de lo cerrado que tengo el opi- suelto.

- Esa sí que no te la creo, culo flojo. Con esa lluvia no se puede jugar- sostiene Buscemi entre didáctico y grosero.

Gol de Perú. Mascherano la deja boyando en el área, centrito y a cobrar. Puñalada en medio de la tormenta.

- Siamo Fuori- mando como certificado de defunción.

- Hay que empezar a estudiar a Costa Rica- propone mi interlocutor con más optimismo.

Y de repente, el milagro. La corajeada del equipo, el buscapié de Insúa y el tocado por la varita que la manda a guardar y entierra los fantasmas. Me envalentono y saco a relucir credenciales.

- Te lo dije! No lo puedo creer, lo odio y lo amo!

- TITANICO. Yo lo amo con todo!- reconoce Buscemi sin ruborizarse.

Maradona barrena por el césped como una foca en el hielo.

- Maradona se tiró de panza al agua. Impresentable, ja, ja, ja!- se dobla Buscemi perdiendo la compostura.

- Verlo a Diegote tirado de cabeza en el medio de la cancha fue demasiado- respondo con las pulsaciones todavía a diez mil.

Buscemi, al fin y al cabo un gran observador de momentos, se entrega ante la impronta maradoneana.

- Me gustó! Parecía un torneo de barrio. Deslizó lindo. Pero serio no fue- explica.

- Entramos colgados del pincel otra vez- digo, y rememoro aquella eliminatoria del 85.

- Se da todo! Somos campeones del mundo otra vez!- se me envalentona Buscemi.

Y me subo a la euforia, vislumbrando la copa dorada en nuestras manos otra vez.

- Que se prepare el mundo, que allá vamos!

Y Buscemi le pone el broche.

- Jugamos para el ojete, pero fue épico. Bye, puta, nos vemos.

- Chau, bala, sos la estrella del blog otra vez- le reconozco y agradezco.

Humilde como los grandes, retruca: - Ja, no, la estrella siempre sos vos fenónemos. Chau.

Y se pierde en la noche. La misma noche alucinada que tiró un temporal insólito, un partido psicótico y un Palermo milagroso, otra vez.

12 comentarios:

Anónimo dijo...

Doble merito del gran Martin, el triunfo y este glorioso intercambio de smss, buenisimo, buenisimo, ahora noto un panza ausente...que fue de el? falto la clasica panquequeada...
Salutti

Albertina dijo...

"El viento arrecia y amontona peruanos en el área como si fueran marionetas. Mascherano, desbordado, juega su peor partido en años. No hay señal de celular por la tormenta, temo por la salud de Buscemi"
IM PE CA BLE.
También esperé algo del Panza.
Pero buenísimo el relato.

Anónimo dijo...

jajajajajajaja

Los comentarios son de pelicula.

jjajajaja

esos mensajes le dieron un condimento especial al partido.

Eso si... parecemos de cabotaje.

albano dijo...

te propongo algo gallo, decime que soy un boludo con toda la confianza... que tal "ver un partido online" por el blogg... no te digo el clasico que se viene porque quiza sea mucho, o por como viene cada uno quiza no. un clasico a puro comentarios. por aca. que te parece?
lo de martin es increible.

El Gallo dijo...

Lo vuá analizar.

El panza vio cómo su celular moría ahogado en la tormenta. Fue muy triste, realmente.

Juan dijo...

gallo muy buen relato. yo estoy armando ya el del miercoles en http://juanitoblasco.blogspot.com/2009/10/cruzando-el-charco-parte-i.html
abrazo
juan

Anónimo dijo...

Maradona no parecia un avioncito en el barro era mas como un hercules.

LO*QUE*SEA dijo...

ayy Gallo como te extrañaba!!

Y Buscemi, si! definitivamente la estrella invitada del blog!

Paute dijo...

Insisto que estos cruces son fantásticos.
Y Maradona estaba emulando el "Liberen a Willy".
Ahora, a sufrir el miércoles.

Anónimo dijo...

Palermo a esta altura es la barra de carbon que salvo a Homero en el espacio

Cunado Nadie me Mira!! dijo...

gallo ayer encontre una revista climbera , me gusto mucho! kooch
nico plager (ex cottage)
a ver cuando te venis al sur bolu
un fuerte abrazo
sabes que con >Armas tenemos un prog de radio?
te voy a linkear a nuestro blog
hace lo mismo no seas garca
lol

El Gallo dijo...

Ah, dale, Nico, también escribo en esa revista!