
Bueno, acá estoy antes de partir a la montaña, con un pie en la terminal de Retiro prácticamente.
Un detalle que noté luego de este fin de año. El champagne tiene un espíritu vengativo innegable. Todo lo que te hace disfrutar la noche en que se lo bebe, te lo hace pagar en igual proporción en la jornada siguiente. O por lo menos es lo que experimentó mi cabeza con una resaca considerable.
Por otro lado, y a pesar de los 41 y pico que marcó el mercurio hoy mesmo, terminé de armar la mochila que me acompañará en mi excursión a la cara sur del Lanín. La miro y me asalta la duda: ¿cómo voy a hacer para cargar ese monstruo que ronda los 28-30 kilos? Ya me duele la espalda y todavía no la cargué.
Los dejo por unos días. Calculo que en las veintitantas horas de micro que me esperan algo se me va a ocurrir para postear. Stay tuned.
6 comentarios:
Cuidado que no haga erupción...
Ahora esta de moda! (?)
Yo estuve en el lanin. No pude escalarlo porque justo hubo tormenta y estaba muy peligroso, pero sin dudas es increible. Realmente. Eso si,
Creo que por el 1999 o 2000 hicimos en bici Junin de los Andes Bariloche.
Gastamos, en camping y comida, sin contar viaje ni nada, $150 cada uno.
Me parece que debe estár un poquito más caro el camping, un poquitin
Q pases muy buenas vacaciones!
Valfierno,me gusto mucho ese libro,
saludos
aaaa
clarooo
ahroa que se fue de viaje no comenta nadie..
INGRATOS! (?)
Coincido con lo del champagne. Yo creo que tiene que ver con la falta de costumbre en tomarlo, por lo menos en mi caso.
Yo soy de la epoca en que para navidad y año nuevo se brindaba con sidra o con ananá fizz, y el champagne solo era para los que "podian". Hoy es darle y darle al champagne, que es una bebida que, como vemos, no se te sube a la cabeza mientras lo tomas, sino que tiene acción y efecto 8 horas mas tarde
Publicar un comentario